Reportaje: Design Thinking: Creatividad y sentimientos en los negocios.

José Pernalete 

@UCVEmprende

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Educadores, artistas, músicos, científicos emprendedores y en general seres humanos hemos usado una herramienta que no es ajena a nuestra condición de individuos, que nos ha concedido  paso a las más grandes invenciones. “La Creatividad”, este elemento etéreo y amorfo es una de las bondades más importantes y diferenciadoras del hombre; el conocimiento, la creación y la imaginación no serian posibles o por lo menos diferentes si no fuese por el hecho de que cambia de manera impredecible en cada uno de nosotros. 

 Claro está, si no fuese por la creatividad nuestros gustos, formas de pensar e interpretar y muchas veces de sentir haría que nuestras personalidades fuesen más homogéneas. Entender que la diversidad es un elemento natural del hombre y que es precisamente esta la que le permite a empresarios, gerentes y emprendedores conquistar clientes identificando y  entendiendo las necesidades de los mismos.

 De esta afirmación nace el “Design Thinking” como un tipo de método para acercarse, entender y solucionar problemas multidimensionales de manera exitosa. Nuestro objetivo es ver cómo este método ha sido utilizado en el ámbito empresarial y para emprendedores.

Design Thinking consiste en 5 paso fundamentales:

1. Emphatize (Empatía  y comprender): Entender que el problema al que se está resolviendo no es uno personal sino del consumidor, su día a día es fundamental para generar una empatía entre el bien y él.Desde el diseño del producto hasta su mercadeo deben ir dirigidos a generar comodidad y sobre todo simpatía, debido a que estos dos elementos son los que fundamentalmente busca una persona con las características que abarca tu producto. Nota: investigar e indagar de manera exhaustiva el contexto de vida y cotidianidad de tu clientela.
2. Define (Definir): esta parte del proceso consiste en precisar los conceptos y el desafío del proyecto basados en las empatías y los lo percibido por nuestros usuarios,
3.  Idear: a partir de aquí de los conceptos y las propuestas empezamos a combinar y realizar diseños y prototipos de manera que podamos cada acercarnos al producto o servicio que resolverá de forma eficiente y  con nuevas ideas para solucionar y complacer al cliente. Es muy útil hacer brainstorm para aglomerar ideas sobre proyectos ya establecidos y así obtener nuevas soluciones, con croquis, mapas mentales para explicar mejor las ideas
4. Prototipar: Viene la parte en la que atamos una cuerda y conectamos al usuario con el servicio con un prototipo o una ´”versión alfa” de lo que estamos ofreciendo. Para esta parte del proceso es importante que mantengamos el contacto constante con nuestra clientela y analizar minuciosamente sus respuestas ante el prototipo, de esta manera estaremos identificando variables y problemas que no habíamos podido identificar antes y mejor aun lograremos disminuir gastos a la hora de cometer e equiparar  errores.
5. Evaluar: Es esta parte del proceso donde recibimos los feedbacks de nuestros usuarios y colegas y de esta manera crear empatía con el cliente. Para lograr la mejor evaluación es recomendable que sencillamente dejemos el prototipo en contacto directo con nuestros usuarios de forma que podremos saber la reacción y opinión más objetiva y sincera posible.

Bibliografia:

·         Institute of Desing at Stanfor, Guía del Proceso creativo, tradicido por Felipe Gonzalez.

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